Vuelve tras 35 años la estela egipcia del yacimiento de Crotone

Estela Egipcia de Crotone
Estela Egipcia de Crotone

Esta semana volvía a Crotone, después de 35 años, una de las piezas más significativas hallada en las excavaciones cercanas al hospital de la ciudad, durante los años 80.

Hasta ahora la pieza había permanecido en la colección del Castello Sforzesco de Milán, después de ser vendida presuntamente por el ladrón que la había usurpado de Crotone.

Los carabinieri, a iniciativa de las autoridad de la población del sur de Italia, han gestionado el retorno de la estela, que ha sido entregada a la responsable de la gestión de los Bienes Arqueológicos de Calabria, Simonetta Bonomi.

Conocida como “Stele di Horo sui coccodrilli» (Estela de Horus sobre los cocodrilos), se trata de una pequeña pieza esculpida en basalto negro, de menos de 10 centímetros, utilizada como talisman contra las serpientes, cocodrilos y escorpiones, en los trayectos que un comerciante egipcio realizaba, aproximadamente entre el 378 y el 341 a.C.

Horus es en la mitología egipcia un muchacho divino, representado en esta estela encima de dos cocodrilos, y apretando en sus manos serpientes, escorpiones y gacelas, animales todos ellos ligados al dios Seth (divinidad del desorden y de la violencia), asesino  fratricida de su hermano Osiride. Iside, después de  que maten a su marido, es obligada a proteger a su hijo Horus del tío asesino Seth, escondiéndolo entre la vegetación del Delta del Nilo. El joven, después de afrontar muchas insidias y afrentas, sobrevivirá a las picaduras y mordiscos de escorpiones y serpientes, convirtiéndose en amuleto contra ellos.

Además de la importancia que tiene para Crotone recuperar parte de su patrimonio arqueológico disperso por los museos de Italia, se abre un precedente importante para que se descentralice la concentración de piezas expuestas en Roma, Turín, Milán o Nápoles. Y es que es la primera ocasión que tras una reclamación, se confisca una pieza de un museo italiano para devolverla a su origen.

No es nuevo este debate que intenta legitimar la reclamación de los tesoros arqueológicos que a lo largo de los siglos han viajado hacia colecciones o museos nacionales o internacionales. Por ejemplo, el British Museum, el Louvre, o el Museo Egipcio de Berlín poseen algunas de las más importantes piezas del arte egipcio, vendidas o «usurpadas» en las excavaciones que los europeos realizaron en el siglo XIX y XIX.