Nacida para defender la desembocadura del Tíber y el acceso a Roma, Ostia Antica fue una ciudad antigua en la costa del mar Tirreno. Su función capital era ser el puerto de Roma. Ostia deriva del latín Ostium, puerta, boca del río, entrada o salida, en definitiva entrada para las mercancías que llagaban a Roma, y salida al mar del río Tíber.
El río Tíber, cuyo cauce ha sido maltratado continuamente cambiando su curso para satisfacer las necesidades humanas -ora militares, ora económicas para el cultivo- era un río navegable para las embarcaciones de hace dos milenios. Esto significaba que Roma era susceptible de ser atacada por mar, y por ende se explica la necesidad de fortificar y controlar el tránsito fluvial tiberino. Hoy en día la bahía de la ciudad romana ha desaparecido, fagocitada por el terreno ganado al mar, sepultando las antiguas marismas y salinas, y la franja de playa creada ex profeso satisface a los romanos que escapan al mar para bañarse y tomar el sol.
HISTORIA DE OSTIA ANTICA
La leyenda ha sostenido que fue Anco Marcio, cuarto rey de Roma, quién en la segunda mitad del siglo VII a.C. fundó la ciudad. Sin embargo no se puede afirmar atendiendo a la ausencia de testimonios arqueológicos que lo prueben. Si que es más probable que existiera un asentamiento cuya economía giraba en la producción de sal, vital para la conservación de alimentos. Del mismo modo no se escapa ni a la lógica, ni a las fuentes como los testimonios del cronista Tito Livio, que la salida al mar del río Tíber era estrategicamente fundamental para la defensa de Roma.
La datación de estructuras más antiguas es de finales siglo IV a. C. tras la caída de la ciudad etrusca de Veyes, situada en el otro lado del Tíber. En los orígenes se creo un castrum de forma rectangular con vocación defensiva, con los característicos Cardo y Decumanus alineados con los puntos cardinales.
Con el paso del tiempo, además de punto defensivo de Roma, adquirió la labor de puerto fluvial. Al puerto de Ostia llegaban barcos de todo el Imperio. Grano de las provincias ultramarinas o de Sicilia, vino o aceite de las islas Cícladas, la Tarraconensis o la Bética o fieras para los juegos romanos del Coliseo llegados de África.
El crecimiento de Ostia significó un aumento de población y el castrum se quedó pequeño. El perímetro de la ciudad aumentó, y se construyó un perímetro más ancho de murallas en época Republicana de Sila o Cicerón.
Durante el Imperio Ostia dibujó una nueva fisonomía urbana. Los peligros de invasiones de fenicios se habían desvanecido e incluso Augusto trasladó el grueso de la flota militar a Miseno en Campania. Acorde a la ya principal función comercial de Ostia, se promovieron grandes graneros y almacenes, destacando los Horrea de Hortensio y los Grandes Horrea, que se sumaron a los que ya existían como los horrea a lo largo del Decumanus cerca de Piazzale della Vittoria.
Una ciudad de tal envergadura necesitaba infraestructuras para el ocio y por ello de época de Augusto son también el teatro en el Decumanus Maximus, el Capitolium (que más tarde reformará Adriano) o el y el Templo de Roma y Augusto, obra ya de época de su sucesor Tiberio. La calidad de los materiales usados en estos nuevos edificios, refleja la riqueza e importancia de la Ostia imperial, que uncluso llegó a acuñar moneda en su propia Ceca.
El emperador Claudio y el puerto
Uno de los puntos de inflexión que contribuyó en la prosperidad de Ostia fue la decisión del emperador Claudio de construir en el 42 d.C. un puerto a a casi cuatro kilómetros de la colonia. Dos muelles semicirculares cerraban el fondeadero de grandes navíos mercantes con mayor capacidad de carga. Un faro en la bocana del mar servía para iluminar a los barcos y orientarlos para llegar sin peligro a puerto. El puerto de Claudio no fue inaugurado hasta el gobierno de Nerón con el nommre de Portus Augusti Ostiensis. En el 62 d.C., una gran tempestad hundió dentro del puerto doscientas embarcaciones cargadas de trigo, lo que llevó a una gran remodelación en el 113 d.C. con un puerto de forma hexagonal que amortiguaba las olas.
A partir del final del siglo I d.C., Domiciano, el último de los emperadores Flavios, acomete una importante reforma urbanística en Ostia. La mayoría de las domus existentes fueron sustituidas por un nuevo tipo de vivienda que acogía a varias familias, espcialmente trabajadores del puerto. Denominadas ínsula, los cimientos eran significativamente más sólidos, y por tanto más elevados. La ejecución fue gestionada por el arquitecto Apolodoro de Damasco.
Para el gobierno del emperador Adriano, Ostia ya había transformado su paisaje urbano, y las insulae prevalecían sobre las antiguas Domus. En las insula vivían varias familias, pero también hubo viviendas más lujosas como las cercanas a Puerta Marina, que contaban con jardines.
Ostia – Una ciudad comercial
El gran número de trabajadores que trabajaban en el comercio llevó a la creación de corporaciones especializadas en diferentes trabajos, como carpinteros, estibadores (saccarii), fabricantes de estopa y cuerdas, urinarii dedicados a la recuperación de productos hundidos o limpieza de alcantarillado, o armadores de barcos (fabri navales). Contaban con áreas, almacenes, comedores, zonas de culto y apartamentos propios. Estas asociaciones profesionales (precursoras de los gremios medievales) tenían sedes, conocidas como scholae, en las que reunían los representantes para tomar decisiones o negociar con Roma acuerdos.
El floreciente puerto contaba también con una legión de funcionarios con diferentes atribuciones, tanto de logística como de comunicación, gestión contable, abastecimiento y bomberos.
Apogeo de Ostia
El foro con el nuevo e imponente Capitolium de Adriano representaba el apogeo de Ostia bajo la tutela de Roma. Y a mediados del siglo II d.C. se estima que su población alcanzaba los 50 mil habitantes, un tamaño que transmite el número de más de tabernae, que alcanzaban las ochocientas. El Foro contaba con 58 oficinas de armadores y comerciantes, conocidas como stationes. La ornamentación con mosaicos de tema marino hacía homenaje al sustento económico de Ostia.
El teatro se amplió hasta llegar a un aforo de 4.000 espectadores. Un siglo después la ciudad empezó a declinar. Con el cristianismo como religión imperante, el emperador Constantino emprendió la construcción de la Iglesia Episcopal de Ostia, dedicada a San Pedro, San Pablo y a San Juan Bautista (hacia el año 330 d.C.). Destruida posteriormente, las excavaciones arqueológicas pudieron sacarla de nuevo a la luz.
Tras la división del Imperio y el declive económico, político y militar de Roma, Ostia también vio oscurecido su futuro. Los fondos de arena del río se desplazaron e hicieron compleja la navegación. La malaria de los humedales se extendió y diezmó a la población, haciendo el área insalubre, y consecuentemente la actividad comercial otrora imponente desapareció. Para la Alta Media (siglo IX d.C), cuando se sufrían las razzias de piratas berberiscos, OStia estaba abandonada, y el resurgir del Renacimiento italiano solo sirvió para que el saqueo despojase de los bellos materiales, las antiguas construcciones romanas, cuyos mármoles fueron a parar a palacetes de Roma o Pisa. En el siglo XVIII los arqueólogos incipientes iniciaron algunas tareas de excavación, alimentando al mismo tiempo los saqueos para la venta en colecciones privadas. Mussolini, gran exaltador del pasado romano, dio el visto bueno a las campañas de excavación coincidiendo con la inauguración la Exposición Universal de Roma, que se abrió en 1942.
El cambio del curso del río y los terrenos ganados al mar hicieron que tanto el yacimiento de de la ciudad antigua de Ostia como su puerto, Portus, estén tierra adentro.
QUÉ VER EN OSTIA ANTICA
Gran parte de los edificios conservados corresponden al siglo III a. C., como el llamado Castrum (campamento militar), el Capitolium o el (templo del dios Júpiter, Juno y Minerva).
Algunos de los espacios que es posible visitar del antiguo Puerto de Trajano son sus grandes almacenes (horrea), los mosaicos del frigidarium de las Termas, el teatro, el edificio de la zona del Foro, el Capitolium, viviendas de varios pisos de la época de Adriano, las termas (siglo II d.C.), las letrinas públicas, el Campo de la Magna Mater, el Thermopolium, las tabernas de los pescaderos, el Macellum y mesones y bares llamados popinae.
VÍDEO DE LA VISITA VIRTUAL A OSTIA ANTICA
Decumanus
El “Decumanus Maximus”, cruza la ciudad antigua de Ostia jalonado por los edificios de Tabernas (tiendas), almacenes, y el teatro construido por a Agripa, yerno de Augusto. Era la calle comercial pero también existían fullonicae (lavanderías), y edificios civiles como la Plaza de las Corporaciones.
Termas
En Ostia coexistieron tres termas: las de Porta Marina, las termas de Neptuno, y las Termas del Foro que conservan las letrinas. En esto complejos termales, acondicionados con letrinas, saunas, gimnasios y piscinas de agua caliente, templada y fría, se hacía más que relajarse, y era habitual hacer reuniones de perfil político y económico.
Las de Porta Marina fueron construidas en tiempos de Trajano, mientras que las sufragadas por el prefecto del pretorio de Antonino Pío, ubicadas junto al foto fueron las últimas y al mismo tiempo las más lujosas.
Templos religiosos
A las divinidades locales romanas se sumaron otras «importadas», y que servían para satisfacer a una comunidad cosmopolita llegada de todas las partes del Imperio romano, como por ejemplo Isis y Serapis de Egipto, o los restos de 18 templos dedicados al dios persa Mitra, una sinagoga judía y una basílica cristiana.
El capitolium fue el templo más monumental, con veinte metros de altura, y en cuyo interior estaba dedicado a la Tríada Capitolina, formada por los dioses Júpiter, Juno y Minerva.
Casas Jardín
Los restos de estas viviendas demuestran que alojaban a dueños con un poder adquisitivo más alto, que disfrutaban de espacios más amplios que las insulae, y de jardines.
Casa de Diana
La llamada casa de Diana es un ejemplo de las insula, bloque de casas de dos o tres pisos superiores.
Santuario de Attis
Es uno de los múltiples santuarios a divinidades no romanas que encontramos en Ostia como la de la Magna Mater-Cibeles. Su culto estaba asociado con el del joven Atis, su sirviente divino. La leyenda dice que la Magna Mater-Cybele, enamorada del apuesto joven Attis, hizo matar a su amada, la ninfa Sangaride. Atis, sorprendido por el dolor, escapó para evitar tener que someterse a los placeres de la diosa. Cibeles lo compadeció, perdonó la afrenta, restableció su virilidad y lo llevó a su servicio.
Almacenes
Además de los almacenes de época republicana, en el siglo II d.C., bajo el mandato de los emperadores Adriano, Antonino Pío y Cómodo, la parte norte de Ostia se transformó para albergar enormes depósitos para almacenar el trigo y otras mercancías con destino a la capital. Estos horrea, seguían una pauta arquitectónica que consistía en una planta rectangular, dispuestos en torno a un patio porticado. Las paredes eran tan gruesas que eran necesarios contrafuertes, asegurando la conservación de los productos almacenados.
Teatro
A finales del siglo I a.C. los habitantes de Ostia pudieron disfrutar del teatro que Agripa, yerno de Augusto había impulsado. Más tarde Cómodo lo refiguró para dar mayor aforo y llegar a los 4.000 espectadores. Se piensa que también servía de espacio para las luchas de gladiadores y cacerías de animales.
RECREACIÓN DE OSTIA y EL PUERTO DE TRAJANO
Información de visita a Ostia antica
Horarios
El horario en en invierno, desde el último domingo de octubre hasta el 15 febrero es de 8.30 a 16.30, con el último acceso de entrada a las 15.30.
Del 16 de febrero – 15 marzo el horario es de 8.30 a 17.00, siendo el último acceso a las 16.30
Del 16 marzo al último sábado de marzo se permite acceder desde las 8.30 a las 17.30, con la última entrada hasta 16.30 .
En primavera/verano, desde el último domingo de marzo hasta el 31 agosto el último acceso permitido es a las 18.15 cerrando el yacimiento a las 19.15.
Del 1 septiembre al 30 septiembre la última entrada a las 18.00 con salida a las 19.00.
Finalmente del 1 octubre al último sábado, el cierre es a las 18.30, con la última hora de acceso a las 17.30.
Ostia permanece cerrado todos los lunes, el 1 de enero, 1 de mayo y 25 de diciembre.
OTROS LUGARES PARA VER EN OSTIA
Pese a la creencia de que en Ostia solo merece la pena el yacimiento romano, conviene no obviar otros lugares como el Lido (paseo marítimo o el castillo del Papa Julio II.
Castillo de Julio II
Junto al yacimiento está el castillo de Julio II (llamado la Rocca di Ostia). El papa Martino V entre 1423 y 1424 erigió una torre circular, rodeada por un foso, para supervisar el tramo del río cerca de las salinas y proteger el tráfico comercial. De este modo la aduana papal controlaba y tributaba el comercio de barcos hacia Roma. Entre 1461 y 1483 El cardenal Guillaume d’Estouteville reforzó los muros de la aldea que se expandieron.
En 1483 a instancias del cardenal Giuliano della Rovere, obispo de Ostia y futuro papa Julio II se reforzó el control adunanero con el castillo. El proyecto lo acometió el arquitecto florentino Baccio Pontelli, siendo terminado en 1486, bajo el pontificado de Inocencio VIII.
De trazos renacentistas, incorpora al conjunto la antigua torre circular, construida por el papa Martino V en 1423-24 para defender la villa medieval. En el castillo se fija la sede aduanera papal, que gestiona el tránsito de navíos que llevan mercancías a Roma .
Primero el asedio dirigido por el duque de Alba Fernando Álvarez de Toledo 1n 1556, que ocasionó graves daños y a renglón seguido la inundación de 1557, -que modificó el curso del Tíber, cerca del castillo, y la formación de pantanos poco saludables donde proliferaba la malaria-, determinaron el abandono del pueblo y de la propia fortaleza. Durante el siglo XIX, el Castillo se convirtió en una prisión para los condenados a trabajos forzados, empleados como mano de obra para las primeras excavaciones arqueológicas en la antigua ciudad de Ostia.
LIDO DE OSTIA
El proyecto urbanista de Mussolini, con sus adustas líneas rectas se plasmó tanto en el barrio romano de EUR como en la nueva ciudad del Lido de Ostia. Las líneas racionalistas se perciben en la denominada «playa de Roma». En primera línea de la costa hay una serie de villas, y detrás viviendas más humildes para los obreros.
Uno de los eventos más importantes de Ostia es el Festival de la Sagra della Tellina. Este evento gastronómico está centrado en la especialidad de Ostia, la Tellina a Passoscuro, spaghetti con berberechos, y que se celebra antes del verano, en mayo o junio.
Cómo llegar
Situada 30 kilómetros al oeste de Roma, Ostia Antica tiene muy buenas conexiones para llegar sin problemas. Por ejemplo en transporte público hay que tomar la línea B de metro hasta la parada Piramide, y luego tomar el tren suburbano Roma Lido hasta Ostia Antica. Desde la estación hay 10 minutos hasta la entrada al yacimiento. Si vamos buscando la playa la opción para llegar es la estación del centro de Ostia.
En coche se puede llegar a Ostia siguiendo la autostrada Roma – Fiumicino, via del Mare o via Cristoforo Colombo.
Actividades y tours
También hay tours guiados con excursiones desde el centro de Roma.