Castillo Sant’Angelo

Castel Sant’Angelo es un icono de la ciudad de Roma. Es imposible no encontrarse con su peculiar silueta cuando cruzamos el río Tiber, camino del Vaticano, o para llegar a la Fontana de Trevi.

Castel Sant Angelo en Roma
Castel Sant Angelo en Roma

En frente del castillo el Tíber se cruza por los puentes Ponte Umberto y Ponte Sant’Angelo. El segundo es uno de los más fotografiados, y está flanqueado por las estatuas de San Pedro y San Pablo (del siglo XVI) y de unos ángeles obra de discípulos de Bernini, que si que esculpió la segunda y la cuarta del lado derecho mirando desde el castillo.

Historia del Castillo

El edificio original construido con con piedra de travertino entre el 135 y el 139 d.C. era en realidad un mausoleo para el sepulcro del emperador Adriano y su familia, coronado en lo alto por una cuadriga comandada por el mismo Adriano. A principios del siglo V se integró dentro del sistema defensivo de la Muralla Aureliana, nombrándose como el Castellum. El castillo resistió los ataques de los pueblos germánicos, y un hecho insólito es que para defenderse se lanzase desde dentro cualquier objeto, incluso la escultura de Fauno Barberini, que quedó enterrada en el foso, y se encontró en una excavación,

La estatua que corona el castillo es fruto de la ensoñación del Papa Gregorio I durante una de las grandes oleadas de peste que asoló Roma en el año 590. La leyenda cuenta que vio al Arcángel San Miguel en lo más alto de Sant’Angelo, como premonición del fin de la peste, que evidentemente algún día tenía que acabar. Por este motivo se colocó una estatua del Ángel, y a partir de ese momento se le conoció como castillo Sant’Angelo.

Los estados Pontificios lo empleaban como castillo de defensa durante los asedios con las monarquías europeas. De hecho en 1277 se proyectó un corredor de 800 metros (passetto di Borgo) que conectaba la ciudad del Vaticano con el castillo, y que ponía a salvo al Papa y a su corte. El Papa Clemente VII lo utilizó durante el asedio por parte de las tropas de Carlos I de España y V de Alemania

También en la Edad Media se construyeron a petición del Papa Alejandro VI,  los cinco baluartes que rodeaban y defendían el castillo, dos de ellos derrocados para construir la Piazza Pia y el paseo del Lungo Tevere.

Las estancias del interior del Castillo Sant’Angelo están decoradas con frescos renacentistas como si fuera un palacio, pero no debemos olvidar que antes de convertirse en museo en 1925 fue también cárcel.

Recorrido por el Castillo Sant’Angelo

VIsta del Tiber y el Castillo de Sant’Angelo.

El papel y evolución del castillo de Sant Angelo a lo largo de la historia se entiende a la perfección gracias a las maquetas que ilustran su transformación desde su construcción como mausoleo de Adriano en el siglo II, y la ocupación de los Papas Alejandro VI en el siglo XV o Urbano VIII (en el siglo XVII), que marcan los momentos más cruciales de la estructura.

Desde el atrio se accede hasta cámara de las cenizas a través de una inacabable rampa helicoidal que conecta las cinco plantas. En ocasiones la distribución de las salas y el mismo interior de Sant’Angelo dan la impresión de formar un gigantesco laberinto donde se suceden salas expositivas de cerámica, escultura, pintura y armas.

Durante su función de prisión algunos personajes como, Galileo Galilei, Alessandro Cagliostro,  el escultor Benvenuto Cellini, acusado por insidias de sus enemigos y que sólo pudo solucionarse con el perdón del cardenal Hipólito D’Este; o Beatrice Cenci, la hija de un aristócrata que mató a su padre por abusar de ella y que fue duramente ajusticiada.

Algunas de las obras que podemos apreciar el en interior del Museo Nacional del castillo Sant Angelo son el busto del emperador Adriano, la campana de la misericordia, el Caballero de Arpino (retrato de Prospero Farinacci), el Cristo Benedicente, el Festín de los Dioses, La Joven con el Unicornio, San Girolamo, La Virgen con niños y Santos, San Miguel Arcángel o Perseo.

Una de las cosas más apreciables son las vistas desde la terraza del Castillo de Sant Angelo, con una panorámica del río tiberino y la cúpula de San Pedro alzándose sobre los tejados de Roma.

Información y horarios de la visita al Castillo Sant’Angelo

Detalle de una de las estufas de los ángeles de la fortaleza de Sant’Angelo.

En caso de afluencia de turistas el acceso al castillo queda restringido por lo que es interesante disponer de la Tarjeta Roma Pass que nos dará acceso prioritario y directo sin colas.

Los horarios para conocer el Castillo Sant’Angelo son de martes a domingo de 9 de la mañana a 19:30 de la tarde, cerrando la venta de tickets a las 18:30. El día de Navidad y año nuevo permanece cerrado.

La visita a Sant’Angelo es gratis el primer domingo de cada mes. Los menores de 18 años no pagan entrada, así como los estudiantes de arquitectura o Historia que acrediten que están cursando estudios.

Las escuelas o grupos de más de 20 personas deben reserva con antelación para asegurase la disponibilidad de visita.

Cómo llegar al Castillo Sant’Angelo

Loa autobuses que tienen parada más cerca son las líneas 62, 23, 271, 982, 280 (parada Piazza Pia), mientras que la línea A del metro se ubica cerca, con las paradas Lepanto u Ottaviano-San Pietro

Mapa del Castillo Sant’Angelo

Junto al Tíber, desde el cielo podemos observar el perímetro original del Mausoleo de Adriano.