La gigantesca mole de piedra lávica, ceniza, bosques y nieve cuenta, pese al peligro que implica, con numerosas poblaciones en sus laderas.
En la costa, Catania, Giarre, Acireale y Taormina son el palco perfecto para fotografiar en todo su explendor el Volcán etna desde la distancia. Catania tiene en su arteria, Via Etna, un telescopio perfecto para entender el potencial volcánico que asoló la ciudad en el siglo XVII. Por contra, el teatro griego de Taormina tiene sus gradas orientadas al monstruo Etneo.
Muchas poblaciones de las laderas, sobre todo las más cercanas a los cráteres están habituadas a que con cierta regularidad se produzcan alertas por la actividad lávica. Equipos especializados efectuan voladuras controladas de dinamita para vehicular las lenguas de lava hacia áreas de control. Zafferana Etnea y Nicolosi saben mucho de esto. Son las dos poblaciones que mejor comunican los senderos y rutas hacia la cima del Etna.
El cinturón de ciudades que recorre el CircumEtnea tiene en Misterbianco, Randazzo, Bronte y Adrano, puntos panorámicos de obligada parada donde aprovechar para comer los famosos pistachos de Bronte.
Poblaciones más importantes del Etna
Adrano
Belpasso
Biancavilla
Bronte
Castiglione di Sicilia
Giarre
Linguaglossa
Maletto
Mascali
Milo
Nicolosi
Pedara
Piedimonte Etneo
Ragalna
Randazzo
S.Alfio
S.Maria di Licodia
Trecastagni
Viagrande
Zafferana Etnea
