Aunque lo más probable es que volvamos con la maleta más llena de lo que la llevamos, conviene tener presentes algunos consejos para decidir que llevar de viaje a Italia.
Basicamente debemos pensar con antelación a que parte de Italia y en que estación del año. No es lo mismo costa o playa que montaña, o invierno que verano, ni siquiera norte o sur. Mientras que en el sur los inviernos son cortos (aunque pueden ser igual de frios), en el norte, y en el interior podemos pasar frío o que nos llueva hasta en verano. Por tanto la climatología manda, y dicta la ropa que debemos llevar. Es importante elegir un calzado cómodo ante la probable «pateada» que emprenderemos cada día.
Por otro lado recomendamos llevar el suficiente dinero en metálico como para prescindir de los cajeros italianos puesto que nos cobrarán comisión.
Para no llevarnos sustos si ocasionalmente debemos acudir al médico la nueva Tarjeta Sanitaria Europea que sustituye al E111 (breves estancias) y al E128 (estancias de estudio), nos agilizará los trámites de atención sanitaria ya que otorga a todos los ciudadanos UE asistencia médica.
Una buena guía de Italia, o de la zona o ciudad donde vayamos nos ayudará a disfrutar mejor las visitas ya que podremos profundizar en lo que visitamos. Si somos de los que preparamos las vacaciones a conciencia, internet nos permitirá cerrar los transportes y alojamientos con antelación.
Y que mejor para luego rememorar el viaje que la cámara de fotos. A menos que seamos compradores compulsivos de postales, olvidarse la cámara en casa sólo se puede solucionar comprando otra en Italia 😉