Como suele pasar en todas las islas las influencias gastronómicas son múltiples, y el factor insular hace que las recetas arraiguen y pervivan más facilmente.
Algunos de los platos de la mesa de Capri son conocidos incluso fuera de Italia, como en el caso de la ensalada caprese, compuesta de forma sencilla de rodajas de tomate, mozzarella fresca, y hojas de albahaca fresca con un toque generoso de aceite de oliva. Sobre esta base se puede añadir pimienta, aceitunas negras, o queso rallado.
Tras el entrante podemos elegir los Totani con patatas (calamares), o bien decidirnos por el pezzogna, un pescado típico del golfo de Nápoles. Se coce a fuego lento y se acompaña de una guarnición de pan duro tostado, a poder ser acompañado con la salsa.
En toda mesa italiana no puede faltar un vino, y en Capri tenemos blancos y tintos que ya degustaban los emperadores romanos en sus villas de verano. Los primeros, de uvas Aglianico, Biancolella, Fiano y Greco son los más adecuados para comer los pescados locales.
Como postre dulce destaca la torta caprese, con sabores árabes que mezclan almenda y chocolate. Y para animar la sobremesa el Limoncello, famoso en toda Italia, pero particularmente rico el de la Costa de Amalfi, Capri y el resto de la Campania.
Las recetas más típicas de Capri
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Chiumenzana
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Cianfotta
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Ensalada caprese, con queso caciotta.
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Limoncello caprese
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Ravioli alla caprese
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Torta caprese
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Totani con Patate. Calamares con patatas y una salsa de ajo, cebolla y guindilla.
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Pezzogna all’acqua pazza
